Hoy me dieron ganas de escribir...


Muchos amigos me han regañado por el abandono en el que tengo a mi querido blog. Tal vez sean las múltiples ocupaciones, tal vez mis musas de la inspiración me han abandonado, tal vez sea porque me gana la pereza de hacerlo o quizás porque no tenga nada que decir, o mejor, quisiera quedarme callada y guardarlo sólo para mí.

Pero hoy me dieron ganas de hacerlo. Y la verdad, no se sobre qué rayos estoy escribiendo exactamente en este momento, pero aquí estoy, tratando de abrir mi alma y mi ser a las letras, y plasmar un poco aquí será lo que estoy viviendo, sintiendo, experimentando en este preciso instante.

Finalizando noviembre se siente algo extraño. Una felicidad inmensa porque llega Diciembre, para mí, el mes más lindo del año, porque gracias a Dios y a mis padres, siempre lo he disfrutado como se merece, con toda su magia y alegría. Y al mismo tiempo, algo de nostalgia por todas las cosas que pasaron en este año y que de alguna u otra forma dejaron huella en mi vida.

Llega diciembre y me preparo psicológicamente para hacer el balance de mi año. Pérdidas y ganancias, cosas aprendidas y cosas olvidadas, a quién aprendí a querer y a quienes me esmero por olvidar, cuántas personas nuevas llegaron a mi vida y a cuántas saqué o se fueron por sí solas, que tan satisfecha me encuentro conmigo misma, que hice por los demás, será que tuve mucho más momentos felices que tristes, qué nuevos defectos descubrí o me hicieron descubrir en mí y que estoy segura quiero mejorar para el año que viene, o tal vez, simplemente, no me dé la gana de cambiar, porque así soy yo.

Pero casi nunca me gusta recordar las cosas negativas del año que pasa. Prefiero pensar positivo hacia el futuro, imaginar las cosas lindas que llegarán con el año que viene, porque eso sí, vivo convencida que cada año trae algo mejor para cada uno, y cada vez lo compruebo más. En estos momentos pienso las cosas que quisiera hacer el año que viene, proyecto mi vida siempre para mejores cosas. Tantas cosas que me gustaría lograr a nivel profesional, personal pero sobre todo sentimental, un área bastante importante en mi vida, ya que al contrario de muchos, y no se sí desafortunadamente, yo soy más pasional, sentimental que racional. Los sentimientos guían mi vida, mi estado de ánimo. Cuando no estoy sentimentalmente bien, es difícil que pueda estarlo en el resto de mis ámbitos vitales. Y este año, ha sido de altibajos en esa área, así que espero que el año que viene pueda alcanzar una “estabilidad” por lo menos…

Hoy me dieron ganas de escribir y terminé haciéndolo sobre Diciembre. Sólo espero que al igual que los otros años, éste también sea el mes más alegre del año para mí y que mis musas de la inspiración vuelvan a visitarme más seguido, para así poder seguir escribiendo seguidito en mi blog y no dejarlo en el abandono total.

Comentarios

  1. Regresaste!!! sigue escribiendo Eri no lo dejes morir!

    ResponderEliminar
  2. Nada más lúcido, querer tratar de dilucidar lo que somos, a través unas líneas, justa aspiración de almas inquietas...tienes el don, escribe más a menudo.

    Un beso
    Firma : Luchito (Presidente de tu club de fans)

    ResponderEliminar
  3. todos mensos ni saben q todaooss

    ResponderEliminar
  4. no me gusta lo que escribis ME GUSTA COMO LO ESCRIBIS

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Cualquier comentario es cariño...

Entradas populares de este blog

¿Competir por ‘amor’? No, gracias…paso.

10 maneras de extrañar...

Volver a sentir...cosas del corazón