"Tú vales mucho"...
El autoestima es una cosa jodida. Siempre he considerado tener “alta autoestima”, me quiero y valoro mucho. Sin embargo, hay momentos y circunstancias de la vida, que te hacen sentir todo lo contrario: el trapito sucio con el que limpiaron, la escoba con la que barrieron y dejaron olvidada, en fin, te llegas a sentir como la cosa más minúscula de la Tierra, el cero a la izquierda, aquello que no vale nada, cuando sin duda es lo contrario, por el hecho de ser seres humanos, ya valemos mucho, al menos para nuestro Creador.
Es por eso, que en esas ocasiones cuando nuestra autoestima la tenemos por el suelo (y en el peor de los casos, por el subsuelo), aparecen los amigos y personas que de una u otra manera siempre tratan de subirte el ánimo, de hacerte sentir importante, de reflexionar la situación, de mirar si vale la pena en realidad quedar en ese estado de “pordebajeada” en el que te encuentras.
Yo no tengo que hacer muchos esfuerzos pa’ que la gente note que no estoy en mi punto. Y es que siempre me destaco por ser muy alegre, recochera, bastante habladora, empalagosa. Así que en esos momentos de “emo”, el cambio es tan drástico que no pasa desapercibido. A veces no quisiera responder preguntas, tengo derecho a sentirme triste, a no compartir mi dolor. Sin embargo, la experiencia me ha enseñado que es mejor sacar todo eso que te duele, que te apachurra el corazón, que sientes que te atormenta, para así despejar el alma y la mente, conviene mucho purificarse, desahogarse y llenarse de nuevas y buenas energías.
La verdad, yo me siento muy afortunada por las amigas que me han tocado. Tal vez no esté todo el tiempo con ellas, ni las vea muy a menudo, pero aparecen justo cuando las necesito para alentarme con sus palabras, consejos, sus inventos para hacerme reír, para hacer que vuelva a ser la misma. Y ni hablar de mi mamá, que además es mi mejor amiga y la mejor consejera del mundo. Y después de escucharlas a todas dándome el respectivo “sermón” (que se los agradezco de todo corazón) la conclusión es muy simple: “TÚ VALES MUCHO”. Y es algo que se supone yo debo saber, debo tener súper claro, pero como todo en la vida, hay veces que las circunstancias parecen esmerarse por demostrarte lo contrario, y nos volvemos tan débiles que dejamos que nos afecten demasiado cosas que de pronto no merecen tanto desgaste de sentimientos, emociones y energías. Como lo dice mi gran amigo Rafael Narvaez “tú eres lo máximo, pero te dejas afectar por lo mínimo”, y así es, tal cual, cuestión que sé debo cambiar, mejorar, pero como todo en la vida es por procesos, paulatinamente iré adquiriendo la experiencia y madurez que me permita afrontar los problemas de una mejor manera.
Entonces, que sea esta la ocasión para agradecerles a todas esas personitas que siempre están pendientes de mí, que con sus palabras, frases, gestos, sermones, regaños, me hacen ver las cosas de la forma como deben ser y no como yo (muy cegada) las quiero y no las quiero ver. Que yo valgo mucho, es el cuento que tengo que terminar de creerme, y tenerlo muy presente cuando por esas situaciones el camino que tome esté lleno de espinas, dolor, desengaños, desilusiones, amarguras, sueños rotos… Porque sí, no me puedo detener, el mundo no se detendrá para que yo arregle mi corazón. La vida sigue y sigue y yo tengo que aprender a bailar al ritmo que me toquen.
“Mejores cosas vendrán” esa frase de cajón que tanto he escuchado, escucharé y seguiré escuchando a lo largo del recorrido llamado vida, es tan sabia en lo profundo. El tiempo sana las heridas y de eso ya he sido testigo, así que es cuestión de asumir una nueva y mejor actitud frente a la vida que sigue, y pensar que las cosas siempre pasan por algo, para bien o para mal.
Por eso, hoy he puesto de nuevo la sonrisa en mi cara, y estoy haciendo un ejercicio mental del carajo (la mente es poderosa, sí señor) pa’ seguir mi vida, feliz y sonriente, como me conocen todos los que me rodean. Nadie dijo que fuera fácil, pero por lo menos yo ya lo estoy intentando, y sé que saldré adelante y bueno, es bacano cuando recuerdas sin sentir dolor, y ese es el punto que quiero alcanzar. Porque aunque las cosas no todas las veces salgan como queramos, no podemos olvidar también los buenos momentos vividos y compartidos, esos que son los que verdaderamente alimentan el alma y te llenan la vida.
Cero resentimientos, cero rencores, mi corazón no es capaz de albergar tales sentimientos, además porque no es sano, eso es peor que un cáncer, te va matando silenciosamente. Nuevamente, gracias a todos mis amigos por las lecciones enseñadas y por hacerme saber lo valiosa que soy para ustedes y que debo ser para mí misma, y que por ningún motivo puedo permitir se me vulnere mi dignidad e integridad, en ocasiones, por mí misma. “¡TÚ VALES MUCHO!”, y ustedes valen el doble para mí...los quiero mucho.
P.D.: Agradecimientos especiales a:
*Arelis Vélez (mi mamá, mi mayor guía)
*Luisa Santiaga
*Lobitokun
*Karen Polo
*María Claudia Holstine
*Naty Marenco
*Frenny Aragón
*Kathy Gámez
*Carolina Jiménez
*Natali Romero
*Zuly Castro
*Caro Cervantes
*Rubén Miranda
*Siana González
*Adriana Caicedo
*Yohanna Caicedo
*Viviana Villafañe
*Viviana De Castro
*César Alejandro Peñatez
*Mauricio Díaz
*Mónica Mendoza
*Katherin Rosado
*Luisa María Jiménez
*Rafael Narváez Barandica
*Aleja Osorio
Y a todos los que me apoyan y me endulzan la vida con sus pechiches…!:)
bueno, qué sería de nuestros malos momentos sin los amigos y sus frases de cajón?
ResponderEliminarEntiendo lo que pones en este post, muchas veces dejamos que barran el piso con nosotras, pero podemos ponernos de pie y volver a levantar la frente!!!
Gracias por escribir sobre esto!!
Qué hermosaaaaaa Erika... Aquí pa' cuando y pa' las que sea preciosa :)
ResponderEliminaraaaaaaaaaaaa gracias! Que buen post, muchas cosas sabías! :D
ResponderEliminarQue bn q compartes sobre esto :D
Siempre que me necesites estaré ahí y cuando no tambien! :D
ResponderEliminarLa frase que ha marcado de una forma muy importante mi vida es esta bonita : "Sonrie aunque la tristeza llene tu alma, nunca sabes a quien esa sonrisa puede cambiarle el dia" te la regalo y comparto contigo porque gracias a tu sonrisa muchas veces mis dias tristes han vuelto a sonreir.
ResponderEliminarHermosa mi geme!!!, siempre vamos a estar ahi cuando nos necesites!!... y si muy cierto, a veces no nos damos cuenta de cuanto valemos en realidad! pero hay que mejorar eso... que seria del mundo sin nosotras??? jejeje....
ResponderEliminarAunq las palabras suenen a cajon, kmo tu dices se siente tan bien recordar las cosas sin dolor.. y pensar q si es cierto lo q te dicen pa`lante amiga q tu vales mucho, animo q kien se lo pierde es èl. (kmo x decir algo).....son animos q aunq tes triste a veces no kieres escucharlos xq estan trillados...pero despues te das cuenta q tan sinceros y ciertos son.....
ResponderEliminarAmiga..que bonitas palabras... que bueno que no albergues en tu corazón sentimientos negativos por nada ni por nadie..Dios y la vida le da a cada persona lo que merece en su justa medida..y seguramente a ti te dará muuchas cosas mas...éxitos y bendiciones!!
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